jueves, 14 de febrero de 2008

Regreso al Futuro

Por causas que no vienen al caso en este momento, he cambiado de trabajo. Esto me ha hecho formar parte de un equipo en el que el más viejo es varios años más joven que yo, cosa que, por supuesto, no es para mí ningún problema

Lo curioso del caso es que estoy sufriendo el síndrome Michael J. Fox: Estoy reviviendo experiencias que pensé que tenía olvidadas; muchas muy buenas y otras no tan satisfactorias.

En el ámbito profesional en el que me muevo actualmente (hasta que me toque la primitiva o el Euromillón, que espero que me obliguen a cambiar mi ocupación,) es usual el trabajo semi-esclavo y el compromiso máximo con la empresa. Esto lo tengo grabado a fuego en la piel y lo cumplo a rajatabla, lo cumplía antes y por supuesto, lo sigo practicando ahora.

¿Qué ha cambiado para que esté embargado por la nostalgia? Aún no lo tengo claro, pero se debe asemejar a la sensación que podría experimentar un padre maduro cuando, por los enrevesados azares de la vida debe volver a cambiar un pañal despúes de mucho tiempo. Aunque sabes cómo huele la mierda, piensas: "Yo ya no tengo edad para esto."

Como padre maduro que eres, lo haces con sumo gusto y con gran cariño, pero no dejas de poner una mueca de hastío de vez en cuando.

Espero acostumbrarme al olor a mierda, o quizá, lo más probable, esperar a que la criatura crezca.

Post escrito cuando escuchaba a The Arctic Monkeys "Whatever People Say I Am, That's What I'm Not"

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